Se trata de la escuela en la que acudió el suboficial Edelio Morínigo, secuestrado por el EPP hace 991 días.
La manifestación fue liderada por Obdulia Florenciano, madre del suboficial, y se realizó frente a la escuela Julio de Otaño, que es el área educativa de Arroyito.
«Desde el año pasado los niños dan clases en un aula móvil, con todo el sacrificio que implica en este tiempo de calor, por eso nos manifestamos y pedimos al Gobierno que nos repare el pabellón antes de derrumbarse», indicó Obdulia.
Milciades Florenciano, padre de familia, indicó que el local presenta graves hendiduras y problemas de estructura, por lo que se ha clausurado. «Esperamos que nos escuchen porque no vamos a permitir que se cierre la escuela, tal como dejaron entender las autoridades», indicó.
Señalaron que la manifestación seguirá en los próximos días si no hay resultado.