Ermelinda Agüero de Urbieta, esposa del ganadero secuestrado Felix Urbieta, pidió disculpas a los captores de su marido por no lograr juntar el dinero que solicitaron por su rescate.
A través de un audio que la familia entregó a los medios de comunicación, la esposa del secuestrado dijo que la familia «fallo» con los miembros del EPP debido a que también hubieron personas que se comprometieron en ayudar economicamente a la familia y al final no lo hicieron.
El grupo armado había solicitado la suma de USD 500 mil por la liberación del ganadero no obstante la familia llegó a un acuerdo y lograron reducir el monto que rondaría los USD300 mil.