La fiscala Sonia Sanguinés, de la Unidad 2 del Ministerio Público, labró acta de imputación contra el jefe comunal, Alejandro Ramón Urbieta Cáceres, por desacato de una orden emanada por el Juzgado de Paz de esta ciudad, por la cual tenía prohibido acercarse a 200 metros de la ciudadana Deysi Silguero, a quien la había agredido hace unos meses. Sin embargo, Urbieta se acercó a 107 metros de la vivienda con el argumento de verificación de obras.

“Tenemos suficientes indicios fácticos, tras la investigación realizada y los estudios periciales, que hubo violación de la medida de restricción, por ello imputamos a Urbieta y a Justo Ramón Brítez por desacato judicial”, señaló la agente fiscal.

El 24 de mayo pasado, Urbieta agredió físicamente a Silguero en el barrio Villa Armando en el momento de una verificación de obra pluvial. La mujer lo denunció y el Juzgado de Paz prohibió que el jefe comunal se acercará a 200 metros de ella; sin embargo, días después, Urbieta volvió al lugar de obras donde se encuentra la vivienda de la mujer, hecho que volvió a denunciar Silguero.

La semana pasada se realizó el trabajo de peritaje en el que se comprobó que se acercó a 107 metros de la mujer, violando la restricción. La imputación fue comunicada al Juzgado de Garantía de turno, a cargo de Manuel Agüero, quien deberá fijar audiencias para las medidas.

Deysi Silguero se mostró contenta por la imputación y tiene fe en que habrá otra imputación por la agresión que había sufrido de parte del lord mayor. “Espero que la fiscala Carolina Quevedo también lo impute por la coacción que sufrí, cuyo video todos lo vieron”, señaló la mujer.

El intendente liberal ya tenía dos procesos, uno por desacato judicial y otro por lesión de confianza. En la Fiscalía obran unas 35 denuncias por supuestas irregularidades en su administración.