Según una de las vecinas, Carmen Godoy, desde hace cuatro meses el arroyo San Miguel está totalmente contaminado, ya que la Essap tira sus deshechos al cauce hídrico generando un olor nauseabundo las 24 horas, enfermedades a los niños y mortandad de animales. “Ustedes (periodistas) están sintiendo el olor que nosotros soportamos de día y noche, también se nos mueren los pollitos y los niños presentan problemas dermatológicos”, explicó.
Destacó que se reunieron con el intendente Alejandro Urbieta y luego con el obispo diocesano, Mons. Miguel Ángel Cabello, a los efectos de buscar apoyo para la solución del problema. “Ya es insoportable, no puede ser que por ser pobres estemos sufriendo esta situación, por ello ya presentamos la denuncia a la Fiscalía y esperamos la reacción del fiscal”, señaló.
CAUSA. El fiscal del Ambiente, Carlomagno Alvarenga, señaló que en su unidad hay una causa contra la Essap, a través de una denuncia realizada por la Junta Municipal, y que después de las verificaciones hechas en la zona los vecinos presentaron otra nota de denuncia, que es arrimada a la misma causa.
Indicó que ayer se constituyeron en el lugar técnicos de la Dirección del Medioambiente del Ministerio Público con el propósito de relevar datos respecto a la situación que se plantea en la zona, especialmente en los lugares donde la Essap tiene problemas de desagüe cloacal.
Enfatizó que el proceso se encuentra en marcha. “Ayer ya tomamos declaración al gerente de la oficina de la Essap de esta ciudad, Lic. Daniel Ojeda, para tener un mejor panorama del problema, algunas posibles soluciones y el responsable del problema”, indicó.