Un violento robo agravado con armas de fuego se registró en la ruta Alegre Itacuá, donde delincuentes interceptaron a dos camiones de una distribuidora y se llevaron aproximadamente 80 millones de guaraníes y varios teléfonos celulares. Las víctimas fueron encerradas en un vehículo abandonado en la zona.

Uno de los vehículos interceptado por los delincuentes

En la tarde del jueves 2 de enero de 2025, alrededor de las 18:30 horas, se registró un asalto a mano armada sobre la ruta Alegre Itacuá, a 500 metros de la Ruta PY 22, en el distrito de San Lázaro, departamento de Concepción.

El hecho involucró a dos camiones de la Distribuidora “Don Antonio”, con sede en Vallemí. El primer vehículo, un Hyundai color blanco, era conducido por el propietario Fredy Daniel Sanabria Ortega, de 41 años, mientras que el segundo, un Mercedes Benz modelo 814, era guiado por Derlis Ramón Gayoso, de 38 años, quien posee antecedentes de prohibición de salida del país.

En los vehículos también viajaban cuatro acompañantes, entre ellos dos menores de edad. Según el relato de las víctimas a la policía, fueron interceptados por al menos cinco hombres armados, vestidos con ropas camufladas, uno de ellos con máscara. Los asaltantes efectuaron disparos intimidatorios y exigieron el dinero recaudado durante el reparto de mercaderías, además de los teléfonos celulares de los ocupantes.

Tras apoderarse de los objetos de valor, los delincuentes encerraron a las víctimas en el camión tipo furgón y recorrieron aproximadamente 500 metros antes de abandonarlas en un yuyal al costado de la ruta. Posteriormente, los atacantes huyeron a pie, internándose en una zona boscosa.

El hecho fue comunicado a la Subcomisaría 30ª de Itacuá por un transeúnte. Personal policial, con apoyo de efectivos de Tres Cerro y Tagatiyá, acudió al lugar. Encontraron el camión Mercedes Benz atravesado en la ruta sin ocupantes y liberaron a las víctimas encerradas en el furgón Hyundai.

Durante la inspección de los vehículos, los agentes hallaron disparos en la carrocería y un revólver presuntamente perteneciente a uno de los delincuentes.