Cerca de 100 familias de las comunidades ribereñas del distrito de San Alfredo exigen cobro de sus salarios a una empresa minera que les adeuda dos meses. Los niños ya no acuden a clases por falta de alimentos y las familias se alimentan de la olla popular preparada por los manifestantes.

Los pobladores comen a través de ollas populares
Los pobladores comen a través de ollas populares

Según la denuncia realizada por los pobladores, la empresa Calería Guyrati, que ocupa a mano de obra de casi toda la población de las riberas adeuda dos meses de salarios a los humildes trabajadores, que actualmente sostienen están sin alimentos, porque las despensas ya no pueden seguir entregando víveres.

Santiago Filártiga, uno de los líderes de la comunidad, indicó que ya están cansados de la explotación y que por ello reclaman lo que en derecho les corresponde. “Acá simplemente dicen que la empresa no tiene dinero; nosotros trabajamos más de lo debido y a veces ni el seguro social abonan”, señaló.

Explicó que aproximadamente 150 personas trabajan en la empresa minera y siempre los explotaron con trabajos duros, insalubres y con pocas remuneraciones. Incluso enviaron videos y fotos exhibiendo el trabajo que realizan.

Niños Afectados. Los escolares de las familias ya no van a las aulas porque no tienen almuerzo escolar y sus padres no cobran sus haberes. La profesora Lucía Céspedes, docente de la institución local, indicó que la comunidad pasa momentos difíciles y solicita ayuda especialmente para con los niños.

El Prof. Rigoberto Troche, director de la escuela, señaló que las familias almuerzan a través de olla popular y que a través de gestiones la Municipalidad de San Alfredo prometió ayudar en algo.

Además pidió a las personas de buen corazón que ayuden a los 140 niños que concurren a la institución.

La comunidad está ubicada en la ribera norte en el distrito de San Alfredo, donde la mayoría se dedica a la explotación mineral como personales de la empresa Guyrati, cuyo dueño es Rubén Alberto Martínez quien vive en Asunción.

El número de teléfono que nos dieron para contactar con la patronal dio apagado.