La protesta con olla popular se realizó este viernes para desmentir las acusaciones de una vecina, quien denunció a familias de la comunidad por supuesta ocupación irregular de un espacio verde.
En la mañana de este viernes, vecinos de la Villa Caacupemí se manifestaron públicamente con una olla popular, en respuesta a las recientes denuncias realizadas por la Sra. Antonia Agüero. La mujer, residente del barrio Punta Pinedo Norte, separada de la villa por una calle, había acusado a varias familias de ocupar de manera irregular un espacio verde donde, según afirmó, la comisión vecinal proyecta construir un tanque elevado y una caseta policial.
El presidente de la Villa, Cecilio Paredes, desmintió las declaraciones de Agüero y aseguró que las 14 familias instaladas en el lugar fueron reubicadas allí con autorización de las autoridades municipales, tras ser afectadas por una fuerte inundación ocurrida en 2019 debido al desborde del arroyo que atraviesa la zona. Según Paredes, dicha reubicación fue permitida por la administración municipal del entonces intendente Tati Urbieta. También negó categóricamente haber amenazado de muerte al esposo de Agüero, como fue señalado en un medio radial.
Durante la manifestación, la Sra. Rusmary Martínez, otra vecina de la Villa, denunció que Agüero la atropelló en seis ocasiones frente a su vivienda, exigiéndole que retire arena que se encontraba en la vereda y la introduzca dentro de su propiedad. Martínez lamentó que sus hijos menores de edad se vieron muy asustados por estas acciones.
También tomó la palabra Katherine Paredes, quien señaló que la movilización buscó esclarecer las acusaciones difundidas por Agüero. Afirmó que las familias afectadas por la crecida cuentan con documentos que respaldan su permanencia en el lugar, y pidió que se recupere la armonía en la comunidad.