Al menos seis comunidades indígenas, de las siete existentes, en Puerto Casado, Departamento de Alto Paraguay, y que se encuentran a 35 km, presentan caminos destrozados, situación que data desde hace mucho tiempo.

Peligro. El docente montado en su motocicleta intenta cruzar el tramo que conduce a la comunidad Maskoy.
Peligro. El docente montado en su motocicleta intenta cruzar el tramo que conduce a la comunidad Maskoy.

Rubén Encina, docente que se desempeña como supervisor de educación indígena, es uno de los afectados directos. Dijo que es una pena que se deba trabajar de esta manera, pero que debe cumplir con su obligación.

Para llegar a los asentamientos indígenas de Casado su medio de transporte es una moto. Desde ahí tropieza con los cortes de ruta porque el agua pasa encima del camino, para llegar a las escuelas de Machete Vaina, Castilla, San Isidro y María Auxiliadora.

A otras comunidades, como Riacho Mosquito y Boquerón Kue, no se llega por tierra, solamente por vía fluvial, y para ello se encarga de fletar una deslizadora, cuyo costo orilla los G. 200.000 cada viaje. Comenta que para cubrir las localidades más distantes, el medio que utiliza es el barco Aquidabán, donde el precio del pasaje varía acorde con la distancia. El rubro que tiene es de G. 1.200.000.

En caso de apuros para llegar a una localidad más lejana, como Fuerte Olimpo o Bahía Negra, el medio más rápido es la deslizadora, única alternativa en esta época, en que las rutas están destrozadas y no hay visos de que en la brevedad mejore.

Fuente. Ultima Hora