El poblador Aníbal Cabañas, de 66 años, residente de la comunidad Cañada San Juan, Colonia Excombatiente del distrito de Horqueta, salió al paso de la denuncia presentada días atrás por la Prof. Elena Colmán, quien lo acusó de usurpar un terreno de 20 hectáreas perteneciente a su familia.

Acompañado de un abogado y de una vecina, Cabañas aclaró en Concepción que la versión difundida por Colmán “no se ajusta a la verdad”. Explicó que el padre de la denunciante fue su padrastro, a quien cuidó durante toda su vida. “El papá de Elena es mi padrastro, él me crió y siempre manifestó su deseo de que yo permanezca en la tierra. Sus hijas nunca se preocuparon de él hasta el 2020, cuando recién aparecieron y comenzaron a reclamar la propiedad”, relató.

Según Cabañas, desde entonces fue objeto de hostigamiento por parte de Colmán y su pareja, llegando incluso a ser desalojado de la vivienda que ocupaba. “Me sacaron de la casa y terminé viviendo en una carpa, pese a que yo atendí a mi papá hasta el último día. Él nunca tituló la propiedad justamente para que yo no quede fuera”, expresó.
El abogado Salvador Sánchez sostuvo que el Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert) resolvió dividir el inmueble en partes iguales con el objetivo de poner fin al conflicto. “El terreno en cuestión es fiscal y, por norma, corresponde al ocupante. Sin embargo, para zanjar el litigio, el Indert decidió partirlo en dos, lo que consideramos la salida más adecuada”, indicó.

Por su parte, la vecina Gleni Andrea Núñez manifestó el respaldo de la comunidad hacia Cabañas, al que reconocen como el legítimo ocupante de la finca. “Él siempre estuvo en esas tierras y cuidó de don Colmán, mientras que su hija apareció después con fines meramente económicos. Incluso, la pareja de ella, un militar retirado, se mostró con actitudes prepotentes hacia la comunidad”, afirmó.
De esta manera, Cabañas y sus representantes rechazan categóricamente la acusación de usurpación y consideran que la decisión del Indert de dividir la propiedad constituye una salida pacífica al litigio.