Familiares y vecinos despidieron con profundo dolor a la niña de 11 años estrangulada en Caazapá. Su madre, entre lágrimas, pidió justicia y exigió respuestas al presidente de la República.

Foto: Gentileza Lilian Acosta.
En medio de un multitudinario acompañamiento y un ambiente de profundo dolor, fueron sepultados este miércoles los restos de Melania Monserrath, la niña de 11 años asesinada en Fulgencio Yegros, Departamento de Caazapá. Su madre, Griselda Noemí Dávalos Duarte, clamó justicia y dirigió un mensaje directo al presidente Santiago Peña, exigiendo mayor protección para la niñez paraguaya.
El cortejo fúnebre, acompañado por globos blancos, pancartas y una comitiva de la Policía Nacional, partió rumbo al cementerio local cerca de las 17:49 horas. Entre llantos y gritos de indignación, la comunidad expresó su repudio al crimen y se unió al pedido de justicia.
“Tú me vas a dar las fuerzas para que tu mamá pueda hacer justicia en tu nombre, mi niña hermosa”, expresó la madre entre lágrimas, prometiendo que no descansará hasta que el culpable pague con la pena máxima. También solicitó la aprobación de leyes más severas, incluyendo la cadena perpetua o incluso la pena de muerte.
La madre, madre soltera de cuatro hijos, reprochó al presidente por la falta de medidas eficaces. “Mirá, presidente, ‘vamos a estar mejor’, habías dicho, y ahora ¿cómo está tu pueblo? Mirá dónde voy a dejar a mi hija”, lamentó, cuestionando el abandono del Estado frente a la violencia.
El caso de Melania ha conmovido a todo el país y se suma a una alarmante serie de hechos de violencia contra menores. El pedido unánime de su entorno es claro: justicia y acciones concretas para evitar que más familias paraguayas vuelvan a vivir esta tragedia.