Con pancartas, globos azules y un fuerte espíritu de comunidad, se realizó en Concepción una caminata solidaria en conmemoración del Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo. La actividad reunió a familias, educadores, organizaciones sociales y ciudadanos comprometidos con la visibilización de los derechos de las personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA).

El evento, que recorrió las calles del centro de la ciudad, tuvo como objetivo sensibilizar a la comunidad sobre las necesidades y desafíos que enfrentan quienes conviven con esta condición, así como también fomentar una cultura de respeto, inclusión y apoyo mutuo.

Durante la jornada se destacó la importancia de promover políticas públicas que garanticen la accesibilidad, la educación inclusiva y el acompañamiento integral a personas con TEA y sus familias. Los participantes hicieron un llamado a fortalecer el trabajo conjunto entre el Estado y la sociedad civil para construir entornos más empáticos y comprensivos.

«Esta caminata no solo es un acto simbólico, es una voz colectiva que pide más espacios de inclusión y una mirada más humana hacia la neurodiversidad», expresaron algunos de los organizadores.

La actividad cerró con presentaciones artísticas, testimonios de familias y un mensaje claro: el autismo no se cura, se comprende.