El coronel Raúl Salinas, hasta ayer comandante de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), espera a su relevo, el coronel Martín Cáceres, cuarto comandante que va a tener el cuerpo de uniformados militares, policiales y de la Senad desde que entró a operar en la zona Norte del país en el combate a los grupos terroristas Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), y la Agrupación Campesina Armada (ACA).
El cambio se produce nuevamente luego de que el pasado viernes, una célula del grupo armado ACA haya atacado a tiros al administrador de la estancia Agüerito, Cristopher Edwards, en Cuero Fresco, distrito de Horqueta, y a un acompañante.
Este solo fue el último incidente con trabajadores de establecimientos de la zona, desde el inicio de este año, cuando la FTC cambió de alguna manera su estrategia de lucha, instalándose en varias estancias con un grupo de 10 a 15 efectivos.
Esto se inició principalmente después del secuestro y muerte de Robert Donato y su esposa Erika, ocurrido en la Ganadera Luisa, de Azotey, el 28 de enero de este año.
Sin embargo, esto no dio resultado y las extorsiones, los ataques, muertes y secuestros siguen y los mismos ganaderos hablan de que esta estrategia tampoco es efectiva.
SIGUEN LAS MUERTES. En marzo del 2015 fueron asesinados tres peones en la estancia Alegría, de Tacuatí. Desde entonces, allí también está un grupo comando de la FTC. Otra de las estancias atacadas en varias oportunidades en San Pedro es El Ciervo, donde fueron quemados tractores, retenidos a trabajadores y después asesinados dos peones. En este lugar están cerca de 15 miembros de la FTC y, según los peones que fueron liberados aquella vez, ellos no fueron auxiliados, sino que volvieron por sus propios medios hasta el casco central de la estancia después de ser liberados tras estar más de 8 horas en poder de los terroristas.
Varios testimonios de trabajadores de este establecimiento y que tuvieron un encuentro con el grupo o estuvieron en poder de ellos, confirman que esa zona está controlada por una célula del EPP encabezada por Manuel Cristaldo Mieres y Lucio Silva.
Uno de los trabajadores expresó que trabajó desde enero a agosto de este año en la fabricación de durmiente en el bosque de este establecimiento y que en dos oportunidades tuvo encuentro con el EPP y de que fue advertido de que abandone el lugar, porque ellos adoptaron ese bosque como su hábitat y no debe ser tocado; le aclaró además que en la tercera oportunidad ya no será advertencia, sino muerte. Este peón, como muchos otros, abandonó la zona, pero los que desoyeron la advertencia fueron condenados a la muerte, como los dos trabajadores que fueron asesinados en setiembre pasado.
Explicó que los militares tienen su campamento en la estancia, pero jamás ingresaron a los montes y los del EPP saben y hasta se burlan de la FTC. Este peón cree que mientras no exista una orden o una decisión de rastrillar los montes no se tendrá ningún resultado contra el EPP, porque ellos, a diferencia de la ACA, se mantienen en los montes, según ellos mismos expresaron, y el objetivo es crear una zona liberada y lo están consiguiendo, explicó el trabajador.
El cambio de comandante de la FTC trae una nueva esperanza para los norteños de que se comience a combatir en serio a los terroristas, ya que pasaron tres jefes, los generales Restituto González y Ramón Benítez y el coronel Salinas.
Fuente:ABC