La Asociación Rural del Paraguay (ARP) – Filial Concepción volvió a alzar la voz contra el avance del abigeato en el norte del país. A través de su presidente, el gremio denunció la existencia de verdaderas bandas organizadas, cuestionó la falta de controles policiales y municipales, y exigió resultados concretos para frenar un flagelo que sigue golpeando a productores grandes y pequeños en el departamento.

Un flagelo que no cesa
El Lic. Gustavo Ruiz, presidente de la ARP Regional Concepción, manifestó que, si bien en ciertas zonas puede observarse una reducción estadística, los resultados siguen siendo insuficientes:
“Evidentemente pudo haber habido una disminución, pero no así los resultados que nos gustaría ver. En varias localidades seguimos viendo bandas que se dedican al abigeato de manera industrial. No podemos aceptar que esto se naturalice”, enfatizó.
Ruiz remarcó que Concepción es un departamento eminentemente ganadero y agrícola, y que la inseguridad rural desalienta a los productores, grandes y pequeños, que invierten sus ahorros en el ganado.

Reclamo a comisarías y municipios
Uno de los puntos más críticos señalados por la ARP Regional es la falta de control en las comisarías y municipios:
“Las comisarías conocen con nombre y apellido a los que se dedican a esto, y aún así no hay acciones contundentes. Además, los municipios carecen de sistemas de control de faena y comercialización de carne, ni siquiera en la capital departamental existe un sistema eficiente. Esto permite que la carne faenada clandestinamente llegue libremente a los mercados locales”, denunció.
El titular gremial recalcó que el problema no se limita a la inseguridad en el campo, sino que se extiende a la falta de controles municipales que facilitan la comercialización del producto del delito:
“Así como se habla de hambre cero, nosotros necesitamos abigeato cero. Al menos una reducción real y visible, y eso depende de controles efectivos”, sostuvo.
Investigación por cuenta propia y amenazas
El sector ganadero también cuestiona que muchas veces los propios productores deben investigar y enfrentar a los delincuentes, arriesgando incluso su seguridad personal:
“En la zona del río Paraguay, los ganaderos han tenido que realizar sus propias investigaciones, enfrentarse a verdaderas organizaciones y, en algunos casos, hasta recibir amenazas. Eso no debería pasar, el productor no puede ser quien haga el trabajo de la Policía”, lamentó Ruiz.

Pedido a las autoridades
Si bien reconoció algunos resultados positivos gracias a la predisposición de fiscales y agentes del Departamento Antiabigeato de la Policía Nacional, Ruiz advirtió que con una sola brigada es imposible abarcar la magnitud del problema en todo el departamento.
“Necesitamos coordinación real entre la Policía, la Fiscalía, los municipios y los productores. Sabemos que hay autoridades comprometidas, pero mientras no se traduzca en resultados claros, el flagelo seguirá afectando a todos. Es hora de respuestas firmes y concretas”, concluyó el presidente de la ARP Regional Concepción.

La ARP Regional Concepción, bajo la presidencia del Lic. Gustavo Ruiz, volvió a elevar la voz de alerta: el abigeato sigue siendo una amenaza constante para la seguridad, la economía y la confianza de los productores en el departamento. Mientras las verdaderas bandas organizadas continúen operando, el negocio clandestino de la carne seguirá expandiéndose, poniendo en jaque al corazón productivo del norte del país.