El cuerpo de bomberos voluntarios de Concepción hizo entrega esta mañana de todo lo recolectado tras impulsar una campaña solidaria para ayudar a la familia cuya vivienda fue consumida por las llamas el martes pasado. La respuesta ciudadana fue inmediata y masiva.

Los Bomberos Azules, que días atrás acudieron para sofocar el incendio registrado en el barrio San Francisco, impulsaron una colecta para asistir a la familia afectada, que perdió absolutamente todas sus pertenencias y quedó solo con la ropa puesta. La iniciativa nació de los propios voluntarios, quienes tras ver la magnitud del daño decidieron movilizar a la comunidad.
La respuesta no tardó en llegar. Vecinos y ciudadanos anónimos se acercaron hasta el cuartel con donaciones de todo tipo, especialmente ropas y elementos para las dos criaturas que vivían en la casa: una bebé de apenas 8 días y otra niña de 3 años. También se recibieron prendas para adultos.



Durante el siniestro, la joven madre Brisa Brítez debió ser hospitalizada por inhalación de humo. Según relataron, fue su hermano quien logró rescatarla a tiempo, junto con sus dos pequeñas, evitando una tragedia mayor.
Carlos Ramos, presidente de los Bomberos Azules, agradeció profundamente el apoyo ciudadano y destacó el gesto de sus voluntarios. Contó incluso que una niña llegó hasta el cuartel con una pequeña mochila llena de ropitas y juguetes para donar, un gesto que conmovió a todo el equipo. Asimismo, señaló que los propios bomberos realizaron una colaboración interna para entregar un pequeño aporte económico a la familia.

Por su parte, Esmilce Galeano —dueña de casa y abuela de las niñas— agradeció cada donación recibida y valoró el acompañamiento de la comunidad y de la Gobernación. Señaló que aún queda por reconstruir la vivienda y que cualquier aporte en materiales como cemento, arena o ladrillos será fundamental para levantar nuevamente el hogar familiar.
