El encuentro, que se disputaba en Concepción, terminó en escándalo tras un polémico penal y una posterior batalla campal entre jugadores, lo que obligó a suspender el partido del Nacional B UFI.
Por el Nacional B UFI, el equipo del Gral. Garay de Concepción, ganaba a Guaraní de Minga Guazú por 1 a 0, hasta que la árbitra Emilia González Rolón, cobró un dudoso penal, entre discusiones intervino dejando su valla, Héctor Espínola, arquero y capitán de Guaraní, quien se llevó por delante a los atletas locales, que discutían con la réfere, también se sumó; Cristian Olmedo con más agresiones, el cotejo quedó suspendido.
Se jugaban los últimos minutos adicionales del partido; Gral. Garay de la Liga Concepcionera de Fútbol, hasta que la árbitra González Rolón, sanciona un dudoso penal para la visita. Entre discusiones, corriendo unos 70 metros, aparece dejando su valla, Héctor Espínola, arquero y capitán del equipo visitante, de inmediato se suman; Cristian Olmedo y Enrique Duarte, para seguidamente darse la reacción de los locales, iniciándose una batalla campal.
La jueza González Rolón y sus lineas; Fernando Villamayor y Néstor González, así como su cuarto árbitro; Carlos Gómez decidieron suspender el partido, a los 48 minutos del segundo tiempo. Ofició de veedor, el Lic. Sergio Quintana, presidente de la 1a. Federación de Fútbol del departamento de Concepción.
HOSPITALIZADOS
En el incidente, quedaron muy golpeados y hospitalizados los atletas del Gral. Garay, Aldo Reguera, Kevin Salinas e Ivan Díaz, así como otros contusos de menor gravedad.
El Abg. Edgar Ramírez, titular del Club Gral. Garay, se mostró indignado por la actuación poco caballeresca de los atletas visitantes, responsabilizando principalmente a Espínola, arquero y capitán de Guaraní, así como a la árbitra, por la falta de profesionalismo para manejar los momentos críticos del partido.
Al intentar hablar con los visitantes, el Preparador Físico de Minga Guazú, el concepcionero, Cándido Orihuela se mostró muy ofuscado y hasta prohibió toda conversación con nuestro medio, al que estuvo por acceder su Director Técnico, Mauricio Pérez. La Policía Nacional intervino para evitar más agresiones e incluso realizó disparos intimidatorias para que se calmen los aficionados, quienes estaban a punto de ingresar al campo de juego.