El pasado fin de semana resultó trágico en la norteña ciudad, debido a la muerte de cuatro personas que perdieron la vida de manera violenta. Tres muertes se produjeron el domingo y un hallazgo de cadáver el día sábado.
Crescencio Amarrilla, de 35 años resultó ser de una de las víctimas producto de una herida de arma blanca. El hecho ocurrió en la colonia Ñepytyvo, alrededor de las 21.15 del domingo. El presunto agresor sería Pedro Sánchez Ortiz, quien después de cometer el asesinato se dio a la fuga.
El hombre participaba de una reunión partidaria en un local deportivo. Posteriormente acercó a una mujer y a sus dos hijas hasta la vivienda de ésta, ubicada en la misma colonia.
En ese momento apareció el supuesto agresor y recriminándole le recordó que no debía acercarse a esa zona, momento en que sacó un cuchillo y le asestó la herida mortal, según relató la mujer que vio los hechos a los agentes intervinientes.
Ese mismo día también perdió la vida Aproniano Arce Larrea tras un accidente de tránsito que se produjo en la zona, informó el corresponsal de ÚH, Carlos Escobar.
Otro asesinato se produjo alrededor de las 5.00 del domingo en un camino rural de la comunidad indígena Tacuaritiy. Resultó víctima Ovidio Carissimo Brítez, de 20 años de edad y el supuesto victimario fue identificado como Carlos Benítez Valiente.
El cacique de la comunidad, Mario Giménez, relató que ambas personas se encontraban participando de un velorio en la zona; estaban ingiriendo bebidas alcohólicas y discutiendo por temas particulares.
En un momento salen a caminar, cuando Carlos Benítez saca un puñal y lo ataca a Ovidio Carissimo con una estocada que fue letal. El supuesto autor también se dio a la fuga.
Mientras que el sábado por la mañana se produjo el hallazgo de un cadáver en la misma colonia indígena. El hombre fue identificado como Eusebio López, de 32 años y su fallecimiento fue a consecuencia de varios golpes con un objeto contundente, según la autopsia realizada por el médico forense del Ministerio Público. En este caso se desconoce a los agresores.
Fuente: UH