En horas de la noche un grupo de individuos con ordenes de captura y frondosos antecedentes intentó perpetrar un hurto agravado en la Capilla Virgen de Guadalupe, ubicada en el barrio San Jorge – Fracción Rincón de Luna de Concepción. Este hecho fue detenido gracias a la rápida acción y organización de los vecinos del área.

De acuerdo con el reporte policial, los delincuentes fueron identificados como Ricky Jesús Vallejos Escobar, Oscar Nicolás Barrios Valiente y Sandra Araceli González. Vallejos Escobar, de 24 años y bajo arresto domiciliario por un caso previo de hurto agravado, fue detenido en posesión de un machetillo de la marca Tramontina al momento de la aprehensión. Barrios Valiente, de 22 años, con una orden de captura por el mismo delito, fue encontrado con una motocicleta de dudosa procedencia, sin documentación. Por último, González, de 26 años, también contaba con una orden de captura por hurto agravado y fue identificada en el lugar del robo junto con los objetos sustraídos: tres sillas plásticas y un foco LED.

El suceso fue reportado a las autoridades a través de una llamada anónima que alertó sobre la presencia de intrusos en la capilla. Los vecinos, liderados por Nancy Esther Ramírez Morel, presidenta de la comisión vecinal, se movilizaron rápidamente al percatarse de la situación. Habían estado vigilando el lugar debido a anteriores incidentes de robos. Al descubrir a los delincuentes, iniciaron una persecución que culminó con la captura de los individuos, evitando así el robo.

Durante el incidente, uno de los delincuentes intentó herir a Nancy Ramírez con el machetillo, pero fue desarmado por un vecino antes de causar daño. La rápida intervención de la comunidad evitó mayores consecuencias.

Tras su captura, los aprehendidos fueron trasladados a la Oficina de Guardia de la Dirección de Policía, donde permanecen bajo custodia a disposición de la Justicia Ordinaria. Los objetos recuperados durante el intento de hurto serán remitidos al Ministerio Público junto con los antecedentes pertinentes.

Este acto conjunto entre la comunidad y las autoridades locales no solo ha evitado un incidente delictivo, sino que también destaca el compromiso y la solidaridad de los residentes del Barrio Rincón de Luna en la preservación de la seguridad en su entorno.