Rómulo Rojas y el capataz Modesto Alfonso fueron interceptados en la estancia Santa Catalina, en el Departamento de Concepción, por cuatro hombres armados. Uno de estos sería Alejandro Ramos.
Un nuevo caso de secuestro ocurrió en el Departamento de Concepción, en donde fueron llevados por un grupo de 4 hombres el ganadero Rómulo Rojas (45) y el capataz Modesto Alfonso (48). Rojas es uno de los propietarios de la estancia Santa Catalina, ubicada en el distrito de Paso Barreto, mientras que Alfonso es el capataz de dicho establecimiento.
La hija de Alfonso realizó ayer la denuncia de la desaparición de su padre en la comisaría de Jhuguá Ñandú. Mientras tanto, también los familiares del ganadero igualmente se movilizaron en todo el día de ayer para conseguir la liberación.
Como pasó. Según fuentes de la investigación, el dueño del establecimiento es informado otra vez del extravío del ganado de la estancia. Ante esta situación acude a la propiedad, específicamente al retiro con su camioneta.
De allí va con un grupo de trabajadores a caballo en búsqueda de los animales hacia la zona de la colonia Jorge Sebastián Miranda (Jhuguá Ñandú). En el trayecto, a unos 10 kilómetros de esta zona de referencia, un grupo de hombres los interceptan (tres de para’i, uno de civil), con escopetas y un revólver y retienen al ganadero y a sus empleados, siempre en la finca. Posteriormente, los trasladan más hacia el fondo del establecimiento donde liberan a los trabajadores y a un menor, excepto a Rojas y a Alfonso. También le dicen al resto que le envíen los medicamentos para su patrón, ya que, según los investigadores, tiene problemas cardiacos.
Además, les señalan a quienes fueron liberados que avisen a la familia del ganadero del secuestro y un monto determinado que deben juntar para que el hombre pueda ser liberado.
El comisario Gilberto Fleitas, jefe de Antisecuestros, dijo que el plagio fue ayer a la mañana y que los delincuentes ya estaban desde la noche del martes en la finca. Sin embargo, otra fuente también de la pesquisa refiere que el plagio en realidad fue ya el martes a la tarde.
Involucrados. Según los investigadores, por las características recogidas del líder del grupo criminal que cometió el plagio, este sería Alejandro Ramos Morel, quien había sido expulsado del EPP, y que luego se alió con miembros de la Agrupación Campesina Armada (ACA).
Para los pesquisidores, el secuestro estaba bien planificado atendiendo que la banda ya estaba esperando a la que sería la víctima.
Antes este ya los habría sorprendido a Ramos y otros, cuando estaban carneando un animal. Posterior a esto es que usaron el mismo modus operandi los secuestradores para atraer al ganadero y cometer el plagio, indicaron.
Fuente. Uhora