La fiscal de turno de Concepción, Silvia González, se constituyó ayer, en el Instituto “Adres Barbero” y en la facultad de Veterinaria, ambos dependientes de la UNA. Aguarda orden judicial para proceder a la verificación de documentos.
A la mañana llegó hasta el local de la Facultad de Veterinaria, donde encontró que la institución ya se encontraba cerrada. En el lugar los estudiantes manifestantes impidieron la entrega de funcionarios al local. La fiscal procedió a cerrar el local con custodia policial.
En esta institución, un grupo de alumnos exige la renuncia del director, Dr. Francisco Larrosa y el esclarecimiento de supuestos planilleros impuestos por el Rector destituido.
A la tarde, por denuncia verbal recibida de alumnos, la agente fiscal se constituyó hasta el Instituto Andrés Barbero, donde procedió al lacrado de la oficina administrativa y prohibió la salida de ningún tipo de documentos y equipos informáticos. “Hemos recibido la denuncia de que supuestamente se ingresó algún equipo informático de la administración y eso venimos a verificar”, señaló la fiscal.
Destacó que espera la orden del juez de turno para proceder a la verificación de los documentos administrativos por lo que deja lacrada la puerta de la administración. “Estamos resguardando la administración, porque queremos realizar el trabajo de verificación respecto a la denuncia de estudiantes”, destacó.
Claudia González, líder de los estudiantes, señaló que ellos pidieron a la fiscalía que llegue a la institución, a fin de seguir el proceso de intervención que ya salió a nivel nacional. “Hubo rumores entre nosotros que un funcionario ingresó una computadora al instituto, la fiscal verificó y no va permitir que salga ese equipo hasta que se haga la verificación”, señaló.
Por su parte, la directora, Lic. Gloria Ortíz de Medina, señaló que hay predisposición total de parte de la directiva a fin de que la fiscalía trabaje sin inconveniente, porque dijo que no hay nada que esconder.