Una historia de ribetes increíbles protagoniza como víctima una septuagenaria de una comunidad rural de Horqueta. Después de años de ocupación, la pretenden desalojar de su vivienda, porque el título de propiedad pertenece a su hijastro.
Según la denuncia recibida, se trata de la señora Celia Oporto de Paranderi de 72 años, quien había comprado por contrato privado de la señora María Dora Lezcano un inmueble de 12 hectáreas ubicado en la localidad de Santa Librada, Horqueta. El compromiso de la vendedora era transferir el terreno, una vez que la compradora pague la deuda con hipoteca en el BNF. Cuando canceló la cuenta la vendedora María Dora Lezcano se desentendió de su compromiso.
Entonces, Celia Oporto decidió iniciar una demanda de Obligación de hacer Escritura Pública para poder obtener su título. El juicio duró 11 años y la Justicia le favorece en todas las instancias, llegando hasta la Corte Suprema de Justicia y, por orden Judicial, se le obliga a la vendedora María Dora Lezcano a transferir el inmueble. Sin embargo, cuando la escribana pidió la Condición de Dominio del inmueble, encuentra que el mimo fue transferido a nombre de Milciades Paranderi Céspedes, hijastro de la Señora Celia Oporto.
La denuncia añade que Paranderí inició un juicio de desalojo con el título en manos, hecho que ya intentó concretarse.
El inmueble fue adquirido en el año 1.999 por contrato privado, en el año 2.003 fallece el marido de doña Celia y en el año 2.005, Paranderi logra la trasferencia de las 12 hectáreas a su nombre.
Actualmente el litigio judicial sigue. La anciana solicita que le devuelvan la titularidad de su terreno y que la dejen vivir tranquila en su casa, de donde ya intentaron desalojarla.
El espacio está abierto para Milciades Paraderí, a los efectos de dar su versión.