A un mes de la denuncia de la Contraloría General de la República por indicios de daño patrimonial de unos 6.400 millones de guaraníes en la administración municipal de Concepción, la Fiscalía General aún no informó de algunas medidas adoptadas como proceso de inicio de la investigación. Mientras tanto, el intendente Alejandro Tati Urbieta de nuevo gestiona un nuevo préstamo de 1.200 millones de guaraníes para gastos corrientes.

El 29 de octubre de este año, la Contraloría General reportó a la Fiscalía General del Estado, a cargo de Sandra Quiñónez, el informe final de una auditoría realizada en el 2018, en la cual se detecta una supuesta malversación de fondos en la Municipalidad de Concepción de un monto de 6.400 millones de guaraníes.

El obispo diocesano monseñor Miguel Ángel Cabello acompañó hace unos días una comitiva de la comisión Conciencia Ciudadana, ocasión en que conversaron con la fiscala general, Sandra Quiñónez, sobre la situación que se vive en Concepción, a consecuencia de la falta de transparencia en la administración del intendente Alejandro Tati Urbieta.

Según se supo, hubo promesa de parte de Quiñónez de llevar un proceso transparente en la investigación; sin embargo, a 30 días de la denuncia, no siquiera se han comunicado nombres de agentes fiscales que investigarán el reporte de la Contraloría. Otras denuncias similares de ciudadanos indignados contra Tati Urbieta también fueron remitidos a la Fiscalía General para que uno o dos fiscales de Delitos Económicos pudieran investigar. Urbieta soporta aproximadamente 40 denuncias de presuntas irregularidades en su administración, solo recibió dos imputaciones. El congelamiento de los casos le dan la posibilidad de ir realizando las obras inconclusas.

Fuente: Ultima Hora