El fiscal ambiental de Concepción, Carlomagno Alvarenga, imputó a dos directivos del Frigorífico Concepción por procesamiento ilícito de residuos e incumplimiento de mitigación de impacto ambiental.
Los supuestos hechos ocurrieron en noviembre de este año y que fueron patentados en una filmación realizada por unos pescadores. El audiovisual se observaba que la industria vertía desechos directamente al río Paraguay. Luego la fiscalía comprobó que eran sangre y agua.
Los imputados son los ciudadanos brasileños Adao Pereira Da Silva, gerente general de la empresa y Antonio Gonzalves, jefe de la planta de tratamiento, quienes resultan ser los responsables de la empresa y se exponen a 5 años de cárcel o millonarias multas.
Alvarenga indicó que accedieron al circuito cerrado de la empresa y se percataron que efectivamente la cañería tuvo averías que, en el momento en que intentaron reparar, los deshechos rebotaron y cayeron directamente al río. “El juzgado de garantía, segundo turno, aceptó la imputación y ya fijó fecha de audiencia a los imputados”, señaló, el fiscal.
La empresa había manifestado que el hecho fue producto de un accidente y que jamás hubo intención de dañar el ambiente.
La misma empresa ya había sido investigada tras la imputación de sus directivos en marzo del 2.011, cuando técnicos de la Secretaría Nacional del Ambiente (SEAN), había constatado que la empresa tiraba pura sangre de animales en el agua sin el debido tratamiento previo que exige la ley.
Tras ello, la empresa construyó una planta de tratamiento y había evitado tirar deshechos al río, hasta que el mes pasado tuvo el problema.