Unas 130 nuevas viviendas populares serán construidas en la ciudad de Horqueta, Concepción, convirtiéndose en el distrito con más beneficio del Gobierno actual.

In situ. Los materiales de construcción que se emplearán en las obras ya llegaron al barrio San Marcos de Horqueta.
In situ. Los materiales de construcción que se emplearán en las obras ya llegaron al barrio San Marcos de Horqueta.

El acto de lanzamiento oficial del proyecto e inicio de obras se realizó ayer en el barrio San Marcos de Horqueta. Unas 130 familias humildes accederán a sus viviendas propias, tras dos años de gestión. “El proceso fue complicado, hemos persistido y fuimos apoyados por nuestro intendente, es así que logramos que la Senavitat nos responda”, señaló Rodolfo Arzamendia, presidente de la Comisión San Marcos.

Sofía Rodas, una de las beneficiarias, indicó que la alegría es indescriptible, porque después de vivir en forma precaria, al fin van a contar con una casa digna donde vivir con sus hijos. “Demasiado contentos estamos, gracias a nuestras autoridades que pelearon por nosotros”, señaló la mujer.

Por su parte, Clorinda Ovelar, representante de la Senavitat, pidió a las autoridades no politizar la adjudicación de las viviendas y también advirtió a los beneficiarios que falsean datos que solo se adjudicará a familias pobres que tienen ingreso solo hasta sueldo mínimo. “Este proyecto de China Taiwán es solo para pobres, por eso sabrán comprender, porque vamos a depurar la lista de beneficiados, ya observamos que hay un docente con sueldo de más de 3 millones de guaraníes”, señaló.

Arturo Urbieta, intendente de Horqueta, dijo que gracias a las buenas gestiones y la distribución de la ayuda sin banderías políticas completan con esta partida 1.400 viviendas construidas.

“Agradezco al presidente Horacio Cartes, a la ministra de Senavitat, Soledad Núñez, por escuchar los reclamos, y quiero que se queden tranquilos, porque nunca hubo discriminación por cuestiones partidarias”, señaló.

Horqueta es la zona más castigada por la presencia de grupos armados, pero actualmente recibe apoyo social.

Fuente. Justiniano Riveros, Uh