Con un incidente planteado por la defensa y con una respetable cobertura de seguridad, arrancó ayer en Concepción el juicio oral y público de Rumilda Giménez y Juana Bernal Maíz, procesadas por el secuestro de Luis Linsdtron y presuntas colaboradoras del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
El defensor de Rumilda Giménez, Florencio Díaz, planteó un incidente de exclusión de pruebas (fotografías de la notebook de Rumilda), cuyo estudio y resolución llevó más de dos horas.
Díaz sostuvo que esa prueba fue plantada, ya que 15 días después de la primera pericia realizada en la máquina apareció supuestamente una ampliación en la que se observan fotografías que supuestamente comprometen a su clienta.
El tribunal rechazó el incidente, argumentando que la misma ya fue planteada y rechazada en dos ocasiones anteriores, tras lo cual se dio inicio a la audiencia.
La fiscala Sandra Quiñonez presentó el alegato inicial y dio detalles de los hechos que supuestamente comprometen a las dos mujeres, entre los cuales resaltan los resultados de las pericias técnicas realizadas a sus celulares, de los cuales se detectaron intercambio de llamadas con los números de celulares utilizados por los miembros del EPP.
Los abogados Díaz y Óscar Cazeneuve argumentaron que la Fiscalía no se preocupó en demostrar dónde, cuándo y cómo se dio el apoyo de sus defendidas al EPP. Reiteraron que es acusación de carácter genérico que no demuestra la culpabilidad de las acusadas, hecho que ya había resuelto el entonces juez Gustavo Bonzi, lo que le costó la remoción de su cargo.
Fuente: Uh