A casi un mes del secuestro del ex vicepresidente de la República Óscar Denis, no se tiene ninguna pista de su paradero ni prueba de vida alguna enviada por sus captores. Tampoco se dan reportes oficiales sobre el tema.
Ello, pese al gran despliegue de fuerzas policiales y militares, así como de vehículos blindados, realizado en los días posteriores a su desaparición.
El último dato que tendría la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) es que en la zona de San Pedro se realizó una gran compra de insulina, medicamento que debe aplicarse el ex vicepresidente.
De hecho, la familia había dejado dicho medicamento en un sitio previamente acordado, pero los captores de Denis no lo retiraron. Ello creó un clima de mucha preocupación en sus familiares debido a que es primordial que reciba dicha medicación.
DESDE EL 9. El también ganadero Denis permanece en poder del Ejército del Pueblo Paraguayo desde el pasado 9 de setiembre, cuando hombres armados irrumpieron en su estancia Tanquerita, de Yby Yaú, secuestrándolos a él y a Adelio Mendoza, un empleado suyo.
Mendoza fue liberado días después y dio solo algunos datos sobre Denis.
Señaló que habían caminado bastante, que pernoctaron a la intemperie, en hamacas y que tuvieron frío. También recordó que su patrón le pidió masajes porque se le acalambró una pierna.
Otro dato aportado por Mendoza es que comían muy poco, algo de maní y frutas, y que escuchó hablar a Denis momentos antes de que lo liberaran, y que tuvo que andar un buen trecho para volver a la estancia.
SILENCIO. Luego de rogar por la liberación o por la apertura de un canal de comunicación con los captores, los familiares de Denis decidieron llamarse a silencio.
Más tarde, debido a la falta de resultados, dijeron que romperían el silencio, pero hasta la fecha no volvieron a convocar a los medios de prensa. La familia había cumplido con la entrega de víveres a comunidades pobres, por un valor de USD 2 millones.
Fuente: Ultima Hora