En una misa hubo plegarias por la vida de Edelio.
En una misa hubo plegarias por la vida de Edelio.

Con la angustia indecible ante el cumplimiento de un nuevo plazo impuesto por los terroristas del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), para el canje de seis epepistas presos por la vida del suboficial secuestrado Edelio Morínigo Florenciano, los padres del policía anunciaron que responsabilizarán al ministro del Interior Francisco De Vargas y al presidente de la República, Horacio Cartes, en caso de que su hijo sea ejecutado por los miembros del EPP. En ese sentido, clamaron al grupo armado que no asesine al uniformado.

Los familiares y vecinos del suboficial Morínigo, secuestrado por la banda terrorista el pasado 5 de julio, iniciaron ayer una vigilia por la vida de la víctima. A la tarde se ofició una misa, en la que pidieron a Dios su intermediación para que el grupo armado se apiade del policía, que pertenece a una humilde familia de Arroyito, dijeron.

TRAGO AMARGO. Doña Obdulia Florenciano de Morínigo, madre de Edelio Morínigo, indicó que están pasando la situación más difícil de sus vidas, ya que el plazo a la vida de su hijo, según dijo, se está cumpliendo en la fecha. “Estamos reunidos rezando a Dios, porque sabemos que solo él puede salvar a mi hijo”, destacó.

En otro momento, pidió al EPP piedad para Edelio, porque si lo matan saldrán de su ideología de proteger a los pobres, razonó la madre. “Si matan a mi hijo pisarán sus palabras, porque matarán a un pobre”, destacó.

Florenciano indicó que si el joven muere, la responsabilidad será de las principales autoridades, es decir el ministro Francisco De Vargas y el presidente Horacio Cartes. “Ellos serán los responsables de la muerte de mi hijo, porque hace rato se hubiera exterminado a este grupo”, puntualizó.

La familia se ratificó en su pedido de “ojo por ojo y diente por diente” en caso del asesinato del suboficial.

COMANDANTE. El comandante de la Fuerza de Tarea Conjunta, coronel Ramón Benítez, visitó ayer a la familia en su vivienda, ubicada en Arroyito, zona Norte. En el lugar se reunió con los familiares para acercarles el apoyo sicológico de quienes están combatiendo al grupo armado.

Según doña Obdulia, el coronel Benítez le prometió que el mal que azota a la zona se va a acabar y que le pidió a la familia mantener la fortaleza tanto espiritual como emocional. Señaló que no puede quejarse de las autoridades de la FTC, pero sí de las autoridades civiles, que nunca los han visitado. “Jamás recibimos visitas del gobernador Luis Urbieta ni de los diputados Ramona Mendoza, Bernardo Villalba y Alsimio Casco; parece que no existimos para ellos”, se quejó.

En la vivienda de los padres de Edelio también se encontraba Elisa Mabel Ledesma, esposa del suboficial Edelio Morínigo. La mujer se mantuvo callada, compartiendo con sus cuñados y cuñadas.

El jueves, los padres del suboficial secuestrado llegaron hasta el Congreso Nacional y el Ministerio del Interior para pedir que en caso de ser ejecutado su hijo, el Gobierno también ejecute a uno de los epepistas presos.
Fuente Uhora.