El juicio oral y público para uno de los presuntos líderes del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) Alcides Oviedo por el secuestro de Arlan Fick continuará el martes, informó el Ministerio Público luego de las audiencias que tuvieron lugar en el predio de la Agrupación Especializada de la Policía Nacional. En la ocasión declaró el padre del joven secuestrado junto con dos efectivos de la Policía Nacional.
El caso del juicio oral y público contra Alcides Oviedo por secuestro, extorsión, apología del delito y frustración a la persecución penal, se reanudará el próximo martes 7 de mayo, a partir de las 8:00.
De acuerdo a una publicación del diario La Nación en horas de la mañana, el Tribunal de Sentencia resolvió prescindir de las declaraciones de Arlan Fick a fin de evitar su revictimización, pero sí se realizó la declaración testimonial de la psicóloga forense Rosel Bogado. Durante la audiencia se proyectaron cuatro videos de las declaraciones realizadas por Arlan Fick en la cámara Gesell como anticipo probatorio. En la ocasión, el joven manifestó que uno de sus captores le dijo que no fue maltratado físicamente, sino psicológicamente.
DETALLES DEL SECUESTRO
Por su parte, uno de los fiscales acusadores, Joel Cazal, expresó que en la fecha prestó declaración Álcido Fick, padre de Arlan, quien detalló cómo sucedió el secuestro, la extorsión a la familia, el pago del rescate y el tiempo de cautiverio.
Según el fiscal Cazal, don Álcido contó que los epepistas le pidieron que cumpla con todo lo que le pedían, ya que en caso contrario “le cortarían el cuello a su hijo”.
Dijo que a los 10 días del plagio pagó la suma de US$ 500.000, dinero que fue prestado de la comunidad menonita, pero que recién después de ocho meses liberaron a su hijo.
El padre reveló además que su hijo sufrió de trastornos mucho tiempo después de ser liberado el 25 de diciembre del 2014. Entre tanto, manifestó que el joven se despertaba gritando en horas de la madrugada.
Recordemos que Alcides Oviedo cumple el próximo julio sus 15 años de condena por el secuestro de María Edith Bordón de Debernardi, aunque de ser declarado culpable por el plagio de Arlan Fick se expone a otra pena máxima de 30 años.