Centenares de humildes familias del distrito de San Lázaro, Departamento de Concepción, se encuentran sin médico desde hace varios meses. Los pobladores aguardan el nombramiento de un galeno para la Unidad de Salud de la Familia (USF).
Según los pobladores, a mediados del año pasado el profesional que trabajaba en la USF había tomado otro destino, quedando la población sin su médico de familia y obligando a las familias a viajar unos 14 km para llegar al Centro de Salud de Vallemí.
Se indicó que las familias de San Lázaro se dedican en su mayoría a los trabajos de calería, que levantan polvo y humo permanentes, hecho que afecta mucho a la salud de los niños y adultos de la comunidad.
«Acá los problemas respiratorios son comunes por el trabajo que se desarrolla, por eso necesitamos un médico permanente», sostuvo un poblador.
Destacaron que en caso de enfermedades tienen que trasladarse hasta Vallemí, donde hay un centro de salud y médicos, sin embargo, sostuvieron que lo correcto debiera ser que sean asistidos en su comunidad.
Según explicaron, los niños son quienes más sufren las enfermedades respiratorias y por la falta de una asistencia cercana suelen tener más complicaciones.
El intendente de San Lázaro, Celso Ovelar, indicó que se está aguardando el nombramiento de un médico por la vía de la excepción, teniendo en cuenta que el departamento ha sido declarado por el Gobierno en estado de emergencia. Indicó la necesidad de contar con un profesional médico en la comunidad, lo cual desconcentrará las atenciones en el Centro de Salud de Vallemí.
Según se supo, ya hubo nombramiento de un odontólogo para la comunidad de Vallemí, pero el Ministerio de Salud aún no ha contratado al profesional médico designado por la 1ª Región Sanitaria y la Atención Primaria de la Salud (APS) para San Lázaro.
En varias otras USF ya fueron nombrados los médicos por la vía de la excepción, sin embargo, hasta el momento no salió para San Lázaro, según la denuncia.
Los pobladores aguardan que Salud Pública tenga en cuenta sus inquietudes y designe al profesional médico que trabaje con la población, más aún en esta época en que ya está a punto de cambiar el clima, que suele complicar la salud de la gente trabajadora.
Unas 500 personas dependen directamente es esta USF, a más de familias indígenas que habitan en las cercanías.
San Lázaro está ubicada a unos 210 km de Concepción, a 14 de Vallemí, y su ubicación siempre la mantuvo postergada.
Sus fuentes de ingreso provienen de las explotaciones de las canteras de caliza, en las que trabaja el 99 por ciento de la población.