Con una multitudinaria caravana y el lanzamiento de globos blancos, piden el fin de la violencia en la zona Norte del país. Las hijas de Óscar Denis volvieron a clamar por una prueba de vida.
“¿Por qué privar de libertad a personas que solo buscan trabajar?”, se preguntaba Beatriz Denis, frente a una multitud que se congregó ante la estatua gigante de la Virgen María Auxiliadora, en el microcentro de la ciudad de Concepción, ayer entrada la noche.
Las palabras de Beatriz, una de las hijas del ex vicepresidente Óscar Denis y una de las voceras de la familia, se escucharon al concluir una multitudinaria caravana que recorrió las principales calles de la ciudad y el lanzamiento de globos de color blanco, pidiendo que cese la violencia en esa zona del país.
“Ante esta multitudinaria presencia, nos llena de emoción y nos llena de fuerza para poder continuar de pie”, dijo sin poder evitar llorar.
La mujer hizo un breve silencio para pensar las palabras mientras de fondo vociferaban en coro: “¡Fuerza, fuerza, fuerza!”, las personas que ya abandonaban sus automóviles y se acercaban a las hermanas para darles su apoyo en el calvario que están sobrellevando.
“¡Basta ya! Pidamos, exijamos. ¡Basta ya de secuestro, basta ya de injusticia!”, reanudó Beatriz, arrancando aplausos y gritos de aprobación de la multitud.
Prueba de vida. En otro momento de su discurso, la vocera de la familia del ex vicepresidente de la República volvió a clamar a los captores de su padre y de su colaborador Adelio Mendoza que establezcan un canal de comunicación para seguir negociando y que otorguen una prueba de vida. “Comuníquense, den una prueba de papá, estamos esperando. La salud de papá es primordial para nosotros”, insistió.
Luego de unas horas del multitudinario encuentro, Beatriz se comunicó con el programa Bajo la Lupa y explicó que habló con representantes del Gobierno para preguntar sobre el canje planteado por el grupo armado para liberar a su padre y a Adelio y que la respuesta fue que no cederían al chantaje.
Admitió también que están conversando en el interior dela familia, la autorización de una búsqueda armada, a pesar del riesgo que esto supone a la integridad y la vida misma de los secuestrados.
Mensaje de la familia Urbieta
Liliana Urbieta, una de las hijas del ganadero secuestrado Félix Urbieta, hizo uso de la palabra en el acto improvisado realizado en Concepción y pidió a sus secuestradores que liberen a su papá, quien fue privado de su libertad hace casi cuatro años por el grupo criminal autodenominado Ejército del Mariscal López. “No te olvidamos ni un segundo de nuestras vidas. Permaneces con nosotros las 24 horas del día, al igual que tus secuestradores”, expresaba la mujer sin poder contener el llanto.
Uno de los momentos más emotivos se dio cuando Liliana se dirigió nuevamente a su padre, revelando que la familia no pudo llegar a pagar su rescate. “Por circunstancias de la vida, no pudimos pagar tu rescate, papito. No es porque no quisimos pagar. Una persona nos falló”, finalizó.
Fuente: Ultima Hora