Las inversiones de los bonos soberanos en la renovación de la infraestructura de producción de la Industria Nacional del Cemento (INC) “son una campaña engañosa para intentar justificar inversiones millonarias”, según advirtió el sindicato de trabajadores de la empresa Sincac, a través de un comunicado a la opinión pública.

Oficial. Hoy, a las 10.00, será inaugurado el nuevo sistema de combustión en Vallemí.
Oficial. Hoy, a las 10.00, será inaugurado el nuevo sistema de combustión en Vallemí.
Justamente, el titular de la cementera estatal, Jorge Méndez, con la presencia del jefe de Estado, Horacio Cartes, realizarán esta mañana, a las 10.00, la inauguración oficial de las reformas hechas en la planta de Vallemí con los bonos soberanos.

 Según la INC, los bonos se invirtieron en el cambio del sistema de combustión del horno de Vallemí, donde se usaron 42 millones de dólares, más de 4 millones de dólares en la renovación del parque automotor, un nuevo molino de cemento de 11,5 millones de dólares, un secador de puzolana de 3,9 millones de dólares y un sistema de envío de cemento de 1.170.000 dólares.
El comunicado del Sincac, que lleva la firma del secretario general Jorge Bóveda y de la secretaria general adjunta Alba Magnolia Aveiro, sostiene que el proyecto que se desarrolló “es el resultado de la amputación arbitraria por parte del Ejecutivo Nacional al que estaba previsto originalmente, ya que el Congreso adjudicó fondos públicos de los bonos soberanos que contemplan la ampliación de la capacidad del horno a 2.700 toneladas por día y no a 2.200 toneladas por día”.

Refiere que la Contraloría General de la República se encuentra realizando un examen especial sobre este aspecto, “ya que los fondos fueron redireccionados presumiblemente en forma irregular”.

Incompleto. El comunicado del gremio asegura que la producción del horno ya con el nuevo sistema de conducción “no alcanza al menos las 2.200 toneladas por día de capacidad nominal de producción contratada debido al suministro incompleto”.

Sobre el punto, dice que la firma adjudicada para los trabajos “no proveyó uno de los principales componentes del horno (sistema de extracción de gases del horno o ventilador tiro horno) que debía ser cambiado, según el pliego de bases y condiciones y el contrato mismo”.

Alerta que, en estas condiciones, “se dejaría de producir al menos 142.800 toneladas de clínker al año, volumen que representará una pérdida de al menos 28.040.000 dólares”.

Finalmente, el Sincac advierte a la ciudadanía que las inversiones millonarias no han logrado hasta ahora los resultados esperados.

Por otra parte, Méndez rechazó en reiteradas oportunidades las denuncias de irregularidades hechas por el Sincac y alega que tiene todo documentado.

 Fuente: Ultima Hora