El Papa Francisco habló en la tarde noche de este sábado durante 40 minutos en el estadio León Condou de Asunción. Entre su prédica condenó el chantaje, abogó por el diálogo y refirió someramente sobre el secuestro de Edelio Morínigo.

Celebración en la Iglesia Metropolitana.
Celebración en la Iglesia Metropolitana.

El Pontífice escuchó las preguntas de los representantes de la sociedad civil y en su respuesta habló de varios temas. Entre ellos, tomó con todo el tema del chantaje que es un delito de moda en el país. “No al chantaje, no pedir algo a cambio de algo.

Eso no construye a ningún país. Si chantajean no sirve para nada. La corrupción es la gangrena de un pueblo”, dijo. También puso en énfasis la importancia del diálogo dentro de la divergencia. “El diálogo es para el bien común, en los puntos en que nos ponemos de acuerdo lo llevamos a la práctica, en el diálogo se dan los conflictos, somos invitados a asumir los conflictos y llevarlos a un eslabón de un nuevo proceso, superar los conflictos apunta a la unidad”, dijo el Papa.

Utilizó términos futbolísticos para pedir juego limpio con esfuerzo, pero sin recurrir al soborno de los árbitros. También dijo que las ideologías no sirven, que siempre terminan mal. Respecto al secuestro de Edelio Morínigo, se notó que no le dieron suficiente información, ya que mencionó que le pidieron hablar de un fulano de tal secuestrado por el ejército.

Finalmente dijo que su reflexión no se dirige a nadie en especial, sino a cada uno de los paraguayos.