Son incontables los daños ocasionados por el fenómeno El Niño en el Departamento de Concepción. Los caminos se encuentran intransitables, las obras están paradas, los comercios inactivos y la agricultura golpeada.

Imposibilitados. Los oleros no pueden acceder a sus hornos para cocer sus materiales.
Imposibilitados. Los oleros no pueden acceder a sus hornos para cocer sus materiales.

Según explicó el arquitecto Rodrigo Fleitas, presidente de la Asociación de Comerciantes e Industriales de Concepción, el problema económico se agrava en la zona, ya que a la recesión económica con que cierra el año se suman la falta de inversiones públicas y el fenómeno El Niño. “Está complicado el panorama, porque el deterioro de la infraestructura vial hace que el comercio disminuya al máximo”, señaló.

El profesional destacó que la llegada del fenómeno natural se sabía con anticipación y no se previó el mejoramiento de los caminos en el departamento, lo cual ahora pasa factura.

Según sostuvo, muchas construcciones marchan a medias y otras paran, hecho que tiene su consecuencia negativa. “Sabemos que la construcción del futuro local del Frigorífico JBS en Belén también sufre retrasos por las lluvias y a esto se suma la irresponsabilidad de la empresa Covipa SA, que no construyó un buen puente auxiliar en la ruta Concepción-Vallemí”, explicó.

Por su parte, Magno Campuzano, olero, comentó que unas 50 familias que se dedican a ese rubro en el barrio San José Olero se encuentran sin trabajo. “Son familias que dependen directamente de este trabajo y ahora no contamos con la posibilidad de conseguir la arcilla”, señaló Campuzano.

Agregó que las personas que se dedican a este rubro son muy humildes y que por eso se siente extremadamente la consecuencia del clima adverso. “Acá hay productores que dependen exclusivamente de su trabajo y creo que el Gobierno debe buscar la forma de apoyarles”, agregó.

COMERCIO. Por otro lado, el comercio en general está paralizado. La gente del campo no ingresa y el flujo comercial disminuyó a lo máximo en los últimos 15 días. “El panorama no es halagüeño para las fiestas de fin de año, tenemos que pagar aguinaldos y no hay ingresos”, sostuvo un constructor y empresario que pidió anonimato.

De acuerdo con el informe recibido, el sector agrícola también sufre el impacto del clima.

El sésamo, por ejemplo, es el rubro de renta en desarrollo que empieza a tener dificultades, a consecuencia de la seguidilla de lluvias.

Fuente. Uh