La capital del Primer Departamento del país no cuenta con servicios de transporte urbano. Las motocicletas han desplazado hace una década a la empresa que se dedicaba a este rubro. Sin embargo, la necesidad se hace sentir.

Carencia. Caballos circulan por la ciudad, menos los buses.
Carencia. Caballos circulan por la ciudad, menos los buses.

Hace unos 10 años que la empresa Perla del Norte dejó de operar en los servicios de recolección de pasajeros a nivel urbano. Según las averiguaciones realizadas, la incorporación masiva de motocicletas en el uso particular fue la mayor causa que motivó el retiro de los vehículos de las calles.

Imagen que queda en el recuerdo de los concepcioneros.
Imagen que queda en el recuerdo de los concepcioneros.

“Escaseaban los pasajeros, porque solo ya se usaban las motocicletas, por ello económicamente ya no soportó la empresa y dejó de operar”, dijo uno de los ex trabajadores de la empresa Perla del Norte.

Según los datos, en la década del 2000 se llegó a tener dos empresas que se dedicaban a este servicio de línea urbana, sin embargo, la que prosperó por muchos años fue Perla del Norte, que también fue asfixiada por la proliferación de motocicletas ensambladas en el país.

De acuerdo con el criterio de mucha gente, de igual forma se necesita el servicio de las líneas urbanas, porque principalmente las personas adultas y de tercera edad, que no usan los biciclos, no tienen forma para desplazarse hacia el centro.

En la Municipalidad señalan que hasta el momento no existen empresas interesadas en cumplir este servicio, por lo que la ciudadanía no tiene la opción de viajar en buses.

Esta ausencia se suple solo contratando los servicios de taxis, lo cual implica mayor erogación económica para los ciudadanos.

Concepción, con 80.000 habitantes, tiene muchos barrios alejados del centro, cuyos habitantes necesitan salir al centro para las compras diarias. En los últimos tiempos, la Comuna enfatiza los controles a los motociclistas exigiendo los documentos. Esto hace que muchas familias se priven de usar sus motocicletas, por falta de documentación, habilitación y licencia de conducir.

Fuente: Justiniano Riveros, UH